No hacer caso siempre y en toda circunstancia al corazón
Entonces párese y muévase lenta y de manera deliberada uno cara el otro, sosteniendo el contacto visual. Desde aquí puedes abrazarte de manera lenta, besarte si lo deseas y luego recostarte juntos. También puede tomar un tiempo para comunicarse entre sí lo que siente en su cuerpo y su corazón.