Por eso estamos seguros de que has oído alguna vez eso de que el chocolate es un sustituto del sexo
La autoconfianza y la soberbia parecen tener la misma cara, no obstante, es un tema de límites que en principio puede ser difícil discernir, hay una línea delgadísima entre los dos que lo puede hacer muy atractivo o absolutamente lo opuesto, un engreído que nadie deseará estar con usted.