Existen distintas maniobras para realizar el acercamiento con su ex. Como ya señalamos en el Paso 1 (Pág. 15). Es importante que escoja un día y una hora neutros para efectuar dicho paso. Los mejores días son los martes; seguidos de lunes y miércoles. En cambio los peores días son los viernes y sábados. Y de la misma manera que conocernos, el conocer a otra persona y llegar a amarla, forma de un proceso: no pasa de un día para otro, no basta una mirada, una sonrisa, unas palabras ni las configuraciones químicas que nos hacen sentir atracción… Son necesarias largas horas de conversación, sentimiento de confianza, además de oxitocina liberándose en nuestro organismo y haciéndonos sentir empatía… Tenemos que estar dispuestos a compartir nuestra vida con alguien, sentir que podemos confiársela sin ver limitada ni vulnerada nuestra personalidad. Puede comenzar las cosas con un cacheo completo, pero lo más probable es que en algún instante sea preciso efectuar una busca simple. ¡Y este es el instante perfecto para romper esas esposas! Para la mujer que desempeña el papel de criminal, usted sabe qué hacer (pista: piense en Sharon Stone en Instinto Básico). Hol Hay una mujer brasileña, alta, delgadita, guapa, sensual y muy lasciva que te está aguardando. No, no pienses que estás soñando. Y si lo estás, tu sueño se ha hecho realidad y lleva por nombre Yaiza. Ese es el nombre de esta cariñosa y apasionada escort brasileña con un cuerpo envidiable, un muy bello pecho natural y una simpatía contagiosa e ideal para hacer que cualquier hombre pueda sentirse a gusto en su compañía. ¿Deseas ser ese hombre? A Yaiza le gustaría mucho que lo fueras. Tiene un montón de besos y caricias reservadas para ti y está esperando, ansiosa, a que vengas a procurarlas. No te retrases. Yaiza arde y sólo tú puedes apagar su fuego.
¿Por qué razón? Porqué ya están atractivos por dentro
Después de la cópula con el macho dominante, la hembra generalmente queda insatisfecha, persiste con altos niveles de excitación y copula con otros machos, con lo que asegura la diversidad de la fecundación. Los recientes avances en anatomía muestran cómo los genitales femeninos son más complejos de lo que en un comienzo se pensaba. En los órganos sexuales de la mujer no sólo existen las partes visibles (clítoris y vagina), sino que asimismo hay una gran red de terminales inquietas que conecta todo el monte de Venus con las partes previamente citadas y con el perineo y el ano. Los besos y relamidos por esta zona probablemente excitarán a la mujer, pero serán pocas las que puedan llegar al orgasmo simplemente gracias a estas acciones, aunque lamer, besar o bien aun soplar por la zona perineal puede resultar muy excitante. Ciertas mujeres disfrutan cuando le lamen y estimulan alrededor del ano. Si tu pareja goza de ese modo, es muy probable que pueda alcanzar el clímax si, al mismo tiempo que lames y estimulas esa zona, introduces algún dedo en su vagina o bien en su ano. Esa combinación suele resultar muy eficaz y muchas son las mujeres que literalmente se derriten de placer ante esa doble estimulación, bucal y digital, vaginal y anal.
Podría serlo pues la Sexualidad es una esencial en el conocimiento de la Pareja. También puede ser una razón enmascarada a fin de que las parejas permanezcan unidas, y puede ser un motivo esencial de muchas separaciones y roturas de las parejas porque el sexo es una actividad importante en la pareja… Y si no lo habéis vivido, hay una ignota de la pareja. Para el masaje de cuello y cabeza, siéntese en la espalda de su pareja sin demasiado peso para distraerlo (o a ella). Recuérdele que siga con toda su atención al lugar donde se toca y cuando su psique divague (¡lo que es la naturaleza humana!), Pídale que devuelva suavemente su atención a su toque.
Empiece por lubricar con un lubrificante a base de agua y juegue con un dedo, añadiendo los otros uno a la vez. Tienes que estar increíblemente cachonda para poder gozar de esto. Usando mucha estimulación y lubrificante, haz que juegue contigo y lentamente añade más dedos. Vea que tan lejos puede llegar. Si puede introducir 4 dedos, estás casi allá y es solo una cuestión de que aplaste sus dedos y gire su mano para ir más adentro. Si se vuelve incómodo, saque algunos de los dedos o bien deténgase por completo. Una senda diagonal es la mejor forma de obtener toda la mano. Somos legión los amantes del sexo oral. Indudablemente, a la penetración le reconocemos su encanto, pero el sexo oral, directamente, nos enloquece. Nos encanta bajar al pilón y nos encanta que se amorren al nuestro. Creemos que pocos placeres superan al de sentir en los genitales la caricia cálida y húmeda de una lengua. De esta forma, cunnilingus y mamada se emplazan, para nuestro gusto, en lo más alto del escalafón de las prácticas eróticas, y nos frotamos los ojos, desconcertados, cuando alguien asegura sin dudarlo un momento que no le agrada el sexo oral, que le da reparo o, directamente, asco.
Iñaki, 45 años, obrero
El pene, en la pose del misionero, al penetrar a una mujer se pasa del punto G, y llega hasta lo profundo de la vagina. Es decir que el largo y el ancho del pene no son determinantes de rozar el punto extremo del gozo femenino. Hombres y mujeres invadidos por el mito del pene grande piensan que su tamaño guarda relación con la intensidad del gozo. Si las mujeres disfrutan sexualmente más con el pene grande es por el hecho de que tienen en el cerebro esa creencia, nada en la anatomía femenina dice que sea de esta manera. Piense por qué razón un hombre o una mujer desean lo que sienten que no pueden tener, o cuán intranquilices medran mientras que esperan algo o bien alguien que está tomando su dulce instante para llegar. Se debe a que cuanto más tiempo tiene que aguardar por algo, más aumenta su deseo y necesidad de hacerlo. Cuanto más aumenta su deseo, más dulce se siente una vez que llega su recompensa. De igual modo, mientras más tensión sexual amontones entre tú y tu pareja, más se vuelvan locos entre sí con anticipación, más vehementemente se manifestará tu deseo mutuo y más dulce será la liberación de esa pasión. En primer lugar, las Artes Venusianas son, hoy día, una disciplina seria. De hecho, la idea de servirse de unos tecnicismos específicos para el estudio y desarrollo de esta disciplina, ni tan siquiera es mía, puesto que nuestros lejanos vecinos norteamericanos vienen haciéndolo prácticamente desde el origen de exactamente la misma. Y, como ocurre con muchas otras disciplinas, el contar con tecnicismos propios evita rodeos agotadores a medio plazo, aparte de facilitar y promover su rigor científico.
Pero asimismo deberían extremarse las cautelas al realizar una atadura que afecte al pecho
Lo que básicamente quiere hacer es proseguir haciendo lo que sea que haya estado haciendo hasta ahora. Usted quiere mantener una onda alegre y risueña y no aparentar estar enojado, deprimido, ni cosa semejante. Hemos hablado de todo esto previamente, con lo que doy por sentado que ya a estas alturas lo comprende. Si tiene un compañero sexual reacio, intente calentarla hasta llegar a un orgasmo abdominal. O bien mientras que está sentada en una silla frente a usted y usted detrás de ella, o con ella en cama y usted arrodillada sobre ella, coloque sus manos en una posición de triángulo sobre su abdomen, y comience a masajear suavemente; nuevamente, susurra a ella. Pídale que respire de manera profunda y se quede quieto. Seguir el masaje. Un masaje de vientre estimulará los ovarios y estimulará su hambre sexual. Mueve tus manos a lo largo, suavemente por su cuerpo. . . Aprieta suavemente y pellizca sus pezones, extiende sus piernas e introduce un dedo para ver si se está mojando. . . Toca, lee, reacciona y vuelve a comenzar. Pronto ella te rogará que la dejes levantarse y te acompañe en la cama.
Cuando hablamos de miedo al sexo hablamos de diferentes tipos de fobias. Una de ellas sería la fobia real a la sexualidad. Este género de temor al sexo puede afectar al sexo en su globalidad o bien a cualquiera de los aspectos que, de un modo u otro, pueden estar relacionados con él. El miedo al sexo puede basarse sobre la fobia a los genitales (propio o del otro) o sobre el temor a la conducta coital o sobre el miedo a que el acto sexual pueda derivar en un embarazo no deseado. El temor al sexo asimismo puede esconder una sensación de asco. A la persona puede darle asco sostener relaciones íntimas. Ahora, a mi chaval le han azotado las pelotas antes y me afirmó que era un poco de cielo, ¿verdad, muchacho? Tu chico sonríe y ves ese brillo malicioso en sus ojos. ¡SÍ SEÑOR! Grita, alegre y alegre. Aleja su polla y sus bolas de su cuerpo hasta que se pone de puntillas, su cara empieza a torcerse de dolor.