Por el hecho de que aunque tenga un aspecto angelical, soy una prostituta malísima expectante de disfrutar del mejor sexo en compañía de generosos desconocidos. Si te apetece un intenso intercambio de caricias, besos y pasión, visita mi dulce alcoba.
Alguien que se involucra con otra persona inmediatamente después de una ruptura o porque tuvo una discusión, y después está de nuevo con su pareja, sencillamente es una persona que no está enamorada de veras.
Y para culminar este artículo, un consejo para ti si con quien juegas es con tu pareja. No debe ver con el nombre, consenso SSC, palabra de seguridad, etc., sino que es un consejo basado en la experiencia, que puede ser una de las bases para el juego mas de lo que no se habla en los artículos.
Procuré palabras que describieran la esencia del intercambio de energía, no la identidad de los participantes. He intentado donante / receptor, creativo / receptivo, iniciador / beneficiario. ¿Las palabras que mejor me marchan? Activa y receptiva.
Ir a la cama en tirantes y medias en lo que normalmente es un día de la semana normal. ¡Obviamente debes asegurarte de que los ve! Con lo que paséate de un lado a otro para conseguir un vaso de agua o bien encender el despertador.
Porque la individualidad o Ahankara de una persona es la resultante de sus sentimientos, emociones, y pensamientos relativos al planeta experimental, que ella ha ido experimentando mediante sus innumerables renacimientos.
Una vez iniciados los trabajos tendrás que estimular y excitar tu compañera, con inacabables besos, abrazos, caricias para solo entonces acercarse a tu blanco. También, cuida para que la elevar la excitación, punto por punto.
Atrayente, erótica, cautivadora y otros adjetivos que me describen y que vas a poder descubrir cuando visites mi alcoba.
De ahí que, si bien te creas que tu comportamiento se basa en argumentos que has llevado a cabo con libertad, a menudo es tu intelecto el que trabaja para buscar argumentos y justificaciones de impulsos más primarios que encuentran su origen en tus cerebros más antiguos.
Es en la vida misma donde se le gana la batalla al violador. Es cuando se prosigue adelante y entonces, se deja al violador sólo en verdad, con su fatal destino al que debe ceder o bien enfrentarse y levantarse por sí mismo.
