Frótalo bien frotado con tu lengua
Las piernas son agradables, en la mujer de piel más suave que el varón y en el varón por el hecho de que los pelos le dan un cosquilleo particular. A la altura de la rodilla en la opuesta a la rodilla, hay una zona erógena importante que se puede chupetear o bien tocar con la lengua tal y como si se tratara de un violín.